La era actual es imparable, caracterizada por un entorno tecnológico global que dirige cada ámbito. En este sentido, el mercado automotriz también ha evolucionado presentando una moderna transmisión automática.
¿Cuál es la función de esta pieza fundamental para poner en marcha un vehículo? Conocida comúnmente como “caja automática”, permite que tu carro cambie los radios de los engranajes sin utilizar la palanca de cambios o embrague.
Y esto se ejecuta en pleno movimiento mientras manejas, librándote de la tarea manual del cambio de marchas. En este artículo conocerás la interesante historia que logró transportarnos con mayor desempeño y comodidad.
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De la transmisión manual a la transmisión automática: Origen
Al adquirir un vehículo siempre surge la incógnita: ¿Manual o automático? Para tomar una decisión correcta es importante comprender la evolución de esta pieza, rendimiento y experiencia que otorga en la conducción.
La transmisión manual se mantiene en el mundo desde hace más de un siglo, siendo favorita hasta los años 40. En esa época se popularizaron en Estados Unidos las primeras cajas de cambio automáticas.
El modelo manual difiere de la transmisión automática por su construcción y operación. Y mayormente, en el hecho de no poder alterar la relación de cambios por sí sola. Este factor influye hasta el día de hoy.
Los carros del siglo XX requerían controlar los tres pedales al usar estas cajas que no contaban con sincronización, el cual (mecanismo de sincronización) se introdujo después. La operación consistía en recurrir al doble embrague, igualando las revoluciones del motor y caja para hacer los cambios.
¿Cuándo se inventaron las transmisiones automáticas?
La historia de la transmisión automática está cimentada en diversos estudios de grandes personajes como Fred Lanchester. En 1889, sus teorías de aerodinámica han sido clave en la evolución automovilística.
La investigación de engranajes epicíclicos lo llevó a desarrollarlos y probarlos en su propio auto en 1902. En este proyecto logró que su transmisión del par motor continuara en movimiento durante el cambio de piñón.
En esta pieza, los dientes o engranajes se distribuían sobre varios piñones ejecutando una rotación gradual sin desgaste por fricción. Su sistema fue introducido y utilizado por Henry Ford en su famoso Modelo T.
El auto poseía dos cambios y marcha atrás, siendo un éxito para la época. La historia cambiaría para siempre con el hito del ingeniero canadiense Alfred Horner Munro en 1921.
Propuso un cambio manual usando aire comprimido, el cual comenzó a generar algunas fallas. Luego en 1937, General Motors ofreció la primera transmisión semiautomática, un sistema de engranajes satélites llamado ATS; Estas siglas corresponden a Automatic Safety Transmission (Sistema de transmisión de seguridad).
El prototipo usaba un mecanismo hidráulico que fue completado en 1939 por la división Hydra Matic, la cual no requería clutch. Así nace la primera transmisión automática. Impresionante, ¿cierto?
El primer carro con transmisión automática
Luego de este hito de General Motors, la compañía lanzó al mercado sus primeros autos equipados con transmisión automática.
La fabricación se realizó en modelos de línea en conjunto con Cadillac, funcionando en los vehículos Oldsmobile 1941.
¿Cómo funciona una caja de transmisión automática?
La transmisión automática es una pieza excepcional e interesante por su complejidad tecnológica y alto desempeño. El motor de tu vehículo se conecta a la caja, la cual posee un conversor de torque.
El torque se transmite con el movimiento circular del líquido en la transmisión automática. Esto, con la acción del aceite genera alta presión concluyendo en el movimiento de la turbina. Elementos que conforman el convertidor de torque que es uno de los sistemas que más ha evolucionado para ofrecernos cajas automáticas súper modernas.
La transmisión automática está compuesta por 3 elementos específicos, los cuales son:
Sistema hidráulico: Usa el líquido de transmisión para controlar los engranajes de marcha y retroceso.
Convertidor de par hidrodinámico: La marcha del vehículo se detiene mientras que el motor sigue funcionando.
Modulador: Determina la velocidad de desplazamiento, acelerador y señal para los cambios.
Actualmente, las transmisiones son controladas por medio de una computadora, integrando un sistema eficiente, moderno y más rápido. Y cada vez más nos acercamos al futuro, presenciando las transmisiones CVT.
Estas siglas significan “Continuously Variable Transmission”, que traducido al español es “Transmisión Continuamente Variable”. Este tipo de transmisión automática proporciona un manejo más suave, imperceptible y cómodo.
¿Por qué amamos las camionetas automáticas?
No cabe duda que los grandes avances en tecnología automotriz han desencadenado una demanda increíble. Ahora es posible contar con un vehículo más eficiente, veloz, “inteligente” y de gran potencia.
Los vehículos automáticos actuales cuentan con seis, siete, incluso doce cambios, pensando en aprovechar el pico de potencia del motor sin mucho esfuerzo. Esto disminuye el consumo y emisiones de CO2.
Por otro lado, la ausencia del embrague hace menos probable que ocurran daños a la caja. En los vehículos híbridos y eléctricos, la caja es una especie de automática, pues gran parte del trabajo lo hace el motor eléctrico.
Su torque es lineal por lo que no necesita engranajes. De hecho, algunas marcas deportivas ya solo están ofreciendo modelos con caja automática pues esta puede conectarse a otros sistemas de control y permitir una conducción mucho más segura.
Pero además predomina el hecho de requerir una máquina que no solo provea la simple movilidad. ¿Quieres llevar a tu familia entera de paseo por la ciudad, explorar nuevos territorios, contar con máximos beneficios, entre otros?
Las camionetas automáticas te brindan una experiencia de conducción avanzada, dinámica y confortable. Todo lo que necesitas está ante ti, un habitáculo ergonómico, interconexión total, entretenimiento e información.
No te preocupes por ejecutar cambios con precisión. Las camionetas automáticas modernas cuentan con todas las prestaciones necesarias. Desde un simple movimiento para abrir las puertas hasta un motor de menos emisiones CO2.
Esto es solo el comienzo, además de una transmisión automática tendrás un vehículo pensado para la seguridad de los tuyos.
Conclusión
Ya sabes todo sobre la transmisión automática, la cual ha transformado la manera de manejar y llegar más lejos. Pero ¿sabes dónde encontrar las mejores camionetas automáticas?
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